En este libro la autora explora algunos de los parentescos de la música andalusí con el flamenco, como un intento de sugerir elementos de juicio en sus conexiones estructurales e históricas. Los contenidos del texto, con abundantes notas documentales y expuestos de manera divulgativa, se mueven entre el examen de los sistemas musicales propios del flamenco y la música arábigo-andaluza, la influencia de nubas, moaxajas, jarchas y zéjeles en el flamenco, el estudio de la copla, la ejecución, la transmisión y la instrumentación, una aproximación a las danzas, la expresión festiva y el papel de los grupos étnicos de moriscos y gitanos, y un apunte último acerca del sentido último de la música que comparten. Herencias y coincidencias se ponen de manifiesto, contribuyendo así a llenar el vacío investigador que aún existe en el análisis comparativo de los sistemas musicales y rituales del flamenco y las músicas árabes. Es un texto fundamental para reconstruir la cultura musical andaluza.