• ENSAYOS COMPLETOS MONTAIGNE (TAPA DURA)

    MONTAIGNE, MICHEL DE CATEDRA EDICIONES Ref. 9788437620350 Altres productes de la mateixa col·lecció Altres productes del mateix autor
    Montaigne es el hijo por excelencia del Renacimiento. Y de su padre, naturalmente, que se empeñó en que la lengua materna de su hijo fuese el latín. De ese modo, el pequeño Michel a los seis años leía las «Metamorfosis» en su lengua original, y uno después a Virgilio, cuyas «Geórgicas» admiraría has...
    Dimensions: 218 x 155 x 42 cm Peso: 978 gr
    No disponible
    44,00 €
  • Descripció

    • ISBN : 978-84-376-2035-0
    • Encuadernació : Cartoné
    • Data d'edició : 01/09/2006
    • Any d'edició : 2006
    • Idioma : Español, Castellano
    • Autors : MONTAIGNE, MICHEL DE
    • Traductors : MUÑOZ ROBLEDANO, ÁLVARO
    • Número de pàgines : 1120
    • Col·lecció : BIBLIOTHECA AVREA
    Montaigne es el hijo por excelencia del Renacimiento. Y de su padre, naturalmente, que se empeñó en que la lengua materna de su hijo fuese el latín. De ese modo, el pequeño Michel a los seis años leía las «Metamorfosis» en su lengua original, y uno después a Virgilio, cuyas «Geórgicas» admiraría hasta el final.

    Estudió leyes en Toulouse; fue alcalde de Burdeos como su padre; leyó el «Heptamerón» y hospedó en su casa a Enrique de Navarra; viajó por Suiza, Italia y Alemania, y dejó un «Diario de viaje» que vio la luz doscientos años después. Tuvo un amigo, Étienne de la Boétie: su amistad, como la de Niso y Euríalo, como la de Pílades y Orestes, ha pasado a ser figura y paradigma.

    Los «Ensayos» es una de esas obras que puede figurar sin reparo en la biblioteca esencial de la humanidad y nos reconcilia con ella. Montaigne ?aquel «bordelés escéptico», como lo llamó Carpentier? habla con la misma libertad y sensatez del conocimiento, de la razón o de la tortura, que de las dimensiones (discretas) de su pene. No mitifica nada, todo lo mira con un saludable escepticismo y cierta melancólica distancia, pues, dice él, «solo los locos están seguros y resolutos»; un oportuno distanciamiento que le impedía caer en fáciles idolatrías. Incluso de las letras escribe: «Téngolas en gran estima, mas no las adoro». Incluso de la razón ?«cántaro de doble asa, que se puede agarrar por la derecha y por la izquierda»?, sabe añadir que «proporciona fundamento para distintas acciones» (II,12).