«La palabra Augatora remite a ojo, agujero, apertura, puerta, y a través del ojo, el agujero, la apertura, la puerta del poema llega a nosotros el mundo de Sujata Bhatt. La puerta está abierta, el agujero da paso al viento de la historia, el ojo es un ojo complejo que remite a la irisación y a la unidad en la multiplicidad, como el que ostenta el pavo real en sus plumas, que nos lanza al giro tornasolado, la rueda de colores?
»En ese abanico múltiple que es Augatora, una ligereza, como de visos tornasolados, se impone, y es que las bases de las que parte la autora son varias y dispares, de modo que el salto de unas a otras es una danza que empieza con los paisajes ?de la India, a Estados Unidos o a Alemania? y las lenguas, desde el gujarati, al marathi o el indi al inglés y al alemán, y, en los poemas, otros, incluida su historia, imaginada».(De la Presentación de Clara Janés.)