Tanto dándole coba a los nostálgicos actores jubilados como aprendiendo las normas de etiqueta imprescindibles al acudir a una fiesta en Beverly Hills,la entusiasta mirada de A.M.Homes y su implacable agudeza resultan brillantes. Pero el corazón de este retrato de Los Angeles y de los personajes que lo habitan es el Chateau Marmont,el famoso hotel de Hollywood que fue, durante mucho tiempo,lugar de encuentro para las estrellas cinematográficas y escenario de las correrías de unas cuantas leyendas del rock and roll.