De Ana Obregón a Francisco Rivera, de Sara Montiel a Lolita, de Antonio Banderas a David Bisbal o la Infanta Elena, estas Cartas de ajuste son un muestrario de oro de nuestros famosos nacionales, unos folios ?con malicia literaria donde suelo a entrar a matar con la dinamita de la metáfora o el estoque del adjetivo, siempre entre el terrorismo y el lirismo, que es lo mío?, según escribe el propio Ángel Antonio Herrera.
Aquí están las prehistofolclóricas en vigor, los chulos de portada, los cornudos de conveniencia, las lolitas de cartelera, las liantas de cóctel, las golfas de saga, los magnates del cubata, las magníficas de la copla y la victoriosas de la tele, completando una colección de populares de la aldea global del cotilleo, que ha acabado siendo el arte mayor del español en estos últimos años.
Todo bajo el vivo estilo que quien es hoy, acaso, la voz más rica, incendiaria y heterodoxa del poblado cronismo social.