¿Cuál es la esencia misma del viaje? El extraordinario escritor que es Javier Reverte la desvela ahora: la esencia misma es la mirada del viajero. Reúne este libro singular una amplia selección nada arbitraria de sus fotografías, regida, como él dice, «no por otra armonía que la sentimental». Y lo que aparece de pronto es una manera de contar con imágenes, tan apasionante como sus libros y novelas. Posee el don de una mirada narrativa, que relata una historia a lo largo de todas las fotos de este libro, y a la vez narra en cada instantánea un mundo diferente. Acompañadas de breves textos sobre los lugares y personas que pueblan los viajes, las fotografías de El ojo sentimental acercan al lector ríos, mujeres, niños, mercados, marinos, trenes, horas y días llenos de vitalidad y colorido, de sonrisas, recorriendo medio mundo por cuatro continentes en pos del mismo sueño que empujó a los grandes viajeros de la Historia, de los que Javier Reverte ya forma parte. Como dice el autor, El ojo sentimental lleva «por caminos algo imprevisibles: sin nostalgia, al lado de algunos instantes robados a la vida y exentos de ánimo de eternidad, a lomos de unas cuantas historias, riendo a veces y en otras ocasiones contemplando con ternura los momentos más tristes, y pisando una senda real que la banalidad de la existencia humana quizás convierta algún día en imaginaria».