Los conflictos familiares tienen diversos orígenes y pueden provocar actitudes que se expresan de diferente modo. La autora ha puesto algunos de estos conflictos en escena, porque, al representarlos, adquieren un dinamismo muy peculiar: en vez de fósiles de museo son trozos de vida que, por problemática que sea, tiene la posibilidad de evolucionar, de mejorarse y hasta de resolverse.