En este libro se analiza el sistema de formación de investigadores que impulsó la nueva política científica surgida en España en la primera mitad de los años ochenta. Dada la peculiar organización social de la ciencia, formar científicos es uno de los procesos sociales más importantes que existen en la institución científica. Esta investigación utiliza dos grandes enfoques para el estudio del caso español, ambos relevantes desde el punto de las ciencias sociales: la perspectiva sociológica y la perspectiva de la política científica.