El presente Nuevo Testamento quiere ser una edición popular tanto por su precio económico como por la misma traducción; pretendemos sea adquirido incluso por el más humilde y que sea entendido por el más sencillo. Quiere facilitar la comprensión de la palabra divina. No pretende prescindir de la iluminación del Espíritu Santo, pero si quiere hablar al pueblo como Cristo le hablaría hoy.