Por primera vez se presenta en nuestro idioma la «Upanisad Brihadranyaka Bhsya» o «Gran Upanisad del bosque», considerada apéndice del «Sathapata Brmana» o «Tratado de los cien caminos». Esta obra de la tradición védica («Yagurveda») fue magistralmente comentada por el gran filósofo advaita ankara.
La obra se compone de libros para ser leídos en el retiro de la naturaleza. En aquellos tiempos, en las tierras del Indo, quienes se sentían atraídos por la sabiduría se apartaban a los bosques para reflexionar y contemplar. La vida contemplativa armonizaba así con la existencia cotidiana.
Estos textos muestran los resultados de aquellas investigaciones filosóficas, en las que destaca la fuerza realizadora del descubrimiento de la verdad. Su expresión, a menudo en forma de diálogos, inserta esta ciencia de la realidad (metafísica) en la vida diaria mediante una relación sincera y apasionada. El ejemplo más característico de esta dimensión humana es el diálogo entre el maestro Yjñavalkya y su esposa Maitrey. La vehemencia aquí mostrada en la búsqueda de la verdad se comprende porque su conocimiento no sólo libera del error sino también de la existencia limitativa que el error ocasiona.