¿Hay una verdad moral enseñada por la naturaleza misma, independientemente de toda autoridad eclesiástica y política y en general de toda autoridad social? ¿Hay una ley moral natural en el sentido de que esta ley, por su naturaleza, tenga validez universal e inconmovible para los hombres de todos los lugares y tiempos y aun para todas las especies de seres dotados de pensamiento y sentimiento? ¿Y cae su conocimiento en la esfera de nuestras capacidades psíquicas?