En palabras de su autor «... balada es una composición poética en la que se desarrolla de forma sencilla un tema legendario o tradicional; y, efectivamente, la Justicia es una leyenda con innumerables versiones a cual más fantástica. Detrás de la leyenda puede haber, o no, una realidad que resulta apasionante descubrir... Tal es el objetivo del presente libro: depurar, en la medida de mis fuerzas, la leyenda y la realidad de la Justicia y el Derecho, analizando lo que estamos viendo y padeciendo, y dejar para la literatura las leyendas. Dicho sea rudamente, evitar que nos den gato por liebre. Los hombres y los pueblos, al llegar a la edad adulta, han de tener coraje para abandonar los cálidos sueños de la infancia y para salir a la intemperie aceptando las cosas como son».
La balada es un género literario poco cultivado por los juristas; éstos se inclinan má a escribir libros de ciencia -aunque a menudo resulten de ciencia-ficción por su alejamiento de la realidad- y, cuando recurren a la lírica, prefieren la elegía, o sea, un lamento por la desaparición de una figura que deja con su pérdida un vacío doloroso. Algo que el autor de esta obra no puede hacer debido a que ni en su vida ni en sus lecturas históricas ha encontrado nunca una Justicia o un Derecho que ahora precisamente haya dejado de existir; y no se puede llorar la falta de lo que jamás se ha tenido.