Cherry Vanilla, doce años, rizos de oro, aficionado a las minifaldas de cuero y al maquillaje. Su mayor ambición es convertirse en el prostituto más solicitado de la estación de servicio de camiones. Dejando de lado a su madre, Sarah, su ídolo y eterna rival, Cherry se convierte en discípulo de Glad, el proxeneta más sofisticado del lugar, y se apropia del nombre de su madre, Sarah, utilizándolo con sus clientes. Sin embargo, cuando decide abandonar el territorio protegido de Glad, descubre lo peligrosa que puede ser su profesión. Sarah es un libro extraño, divertido y brutal, en el que el autor nos habla de una vivencia personal grotesca y desesperada, plagada de personajes a la deriva, lo que, sin duda, lo convierte en un testimonio conmovedor.