Este libro es un relato simbólico y descarnadamente lúcido, poético en su planteamiento y magistral en su resolución, cargado de una fuerza irresistible que nos conduce desde la primera página al centro del laberinto del novelista piamontés: la triple imposibilidad de regresar al origen, de averiguar nuestro nombre verdadero, de encontrar un sitio en el mundo.