Cada vez con más frecuencia, la geografía, las fronteras e incluso el tiempo apenas tienen ya que ver con la forma en que dirigimos nuestros negocios y nuestra vida personal, y todo ello gracias a la imparable revolución que está experimentando el mundo de las comunicaciones. Según la prestigiosa periodista Frances Cairncross, esta «muerte de la distancia» será la fuerza económica que dará forma al conjunto de la sociedad por lo menos durante la primera mitad del próximo siglo. Y por eso su nuevo libro, tan profético como apasionante, está dedicado a proporcionar al lector la guía más adecuada que concebirse pueda para enfrentarse con ánimos al milenio siguiente.
Los amigos, los colegas y los clientes pueden estar en cualquier parte --a la vuelta de la esquina o en el otro extremo del mundo--, pero las nuevas formas de comunicación son capaces de borrar todo tipo de distancias y variar sustancialmente las formas en que, hasta ahora, se han establecido las relaciones entre países y ciudadanos, empresas y trabajadores, padres e hijos. Cairncross escribe con elocuencia y de forma convincente sobre los cambios que están experimentando las comunicaciones y sobre el modo en que las consecuencias de todo esto no sólo variarán los conceptos de grande y pequeño, rico y pobre, sino que también influirán en un gran número de decisiones: los lugares en que se ubicarán las empresas, la clase de trabajo que harán las personas, la manera en que los gobiernos incrementarán sus ingresos, el tipo de negocios que tendrá éxito, el desarrollo y la evolución de las ciudades, etc. Y el resultado es tanto un agudo y perceptivo análisis de la industria de las comunicaciones como un fascinante relato de lo que será la vida tras la muerte definitiva de todas las distancias, para nosotros y para las generaciones venideras.