Esta obra es una crónica rigurosa, objetiva y documentada de la difícil gestación y puesta en marcha de la diócesis Barbastro-Monzón, un proceso que ha durado medio siglo y que lamentablemente, a la hora de lanzar esta edición, aún sigue en parte abierto. La minuciosa descripción de todos los avatares de este largo contencioso, en el que se han visto implicadas la Iglesia y la sociedad civil de Aragón y Cataluña, constituye un sorprendente relato sobre la lucha por defender, más allá de la definición de un territorio, de la identidad de un pueblo. El valiente testimonio de los párrocos de la llamada Franja, la unánime conjunción de pareceres y actitudes de todas las instituciones y fuerzas políticas y religiosas aragonesas, y la singular aportación documental son, tal vez, los capítulos más interesantes de la historia apasionante del nacimiento de la última sede episcopal en España.