En nuestra vida cotidiana, en muchas ocasiones decimos ante un error: " ¡Esto me pasa por no pararme a pensar! " o escuchamos a niños afirmando con rotundidad después de suspender un examen: " ¡Sabía toda la materia del examen!, pero no entiendo por qué no leí detenidamente todo lo que me preguntaban " .
En esta obra se expone de qué manera las personas, especialmente los niños en edad
escolar, solucionan los problemas caracterizados por su incertidumbre, es decir, los problemas ante los que se puede elegir entre distintas soluciones que requieren " pararse a pensar " . Centrándose en dos estilos de respuesta -el impulsivo y el reflexivo- y analizando ambos conceptos se explica por qué surgen esas dos formas características de responder, y cómo se pueden identificar, modificar y prevenir.