En este libro, reconocido internacionalmente, David J. Weber dilucida la influencia de la cultura española en los territorios del sureste de los Estados Unidos, acabando así con los supuestos de que los orígenes de este país residieron completamente en las trece colonias inglesas. La obra destaca la influencia española en la vida, las instituciones y el entorno de los indígenas, y la forma en la que incidieron estos elementos de Norteamérica en la vida y en las instituciones de España en la época de la Colonia.