El emperador Maurizio de Bizancio envía a España al joven Basilio para que entregue una carta y un anillo con un gran diamante al rey visigodo Leovigildo. El hijo mayor del rey se ha sublevado contra su padre y algunos de sus partidarios no quieren que el anillo llegue a su destino. Basilio conocerá las intrigas palaciegas, pero también la amistad y el amor.