El dominó es mucho más que un juego ancestral, popular y de grupo. Es, además, la confraternización alrededor de una mesa mientras se reparten fichas y se entabla una amistosa guerra para hacerse con los laureles del éxito. Conocer es tanto como ganar y aunque las fichas las reparte la suerte hay que aprovechar al máximo las posibilidades de lograr una combinación ganadora. ¿Cómo conseguir ganar más o perder menos? El juego del dominó le enseña que las reglas mecánicas de jugar al dominó son muy pocas, pero que junto a ellas se encuentran las no escritas que conforman la lógica del buen jugar. Y esas reglas lógicas las deduce la Inteligencia ayudada por el conocimiento.