"Siempre confié en que Ana Tarambana sería un éxito -afirma Lauren Child- porque realmente me lo pasé muy bien escribiéndolo". Lauren describe su libro como "una ensaladilla de vida familiar", donde Ana Tarambana es una colegiala pizpireta en una pintoresca familia más semejante a los Simpson que a la casa de la pradera.
Existe una simpática fricción (o sea, una lucha sin cuartel) entre Ana y su hermanito, en cambio idolatra a su hermana mayor, mientras que ignora a su meditabundo hermano mayor que se marchita en su dormitorio. También retrata a una madre estresada, que languidece en la bañera rodeada de velitas perfumadas, y que puede decir "me tenéis todos harta" en danés, y al padre que se acomoda en su ostentosa oficina y escucha a Frank Sinatra. Olvidemos las sosas y débiles neurosis de Ally McBeal¿, Ana Tarambana es la próxima y verdadera heroína de este siglo.