NEWMAN, GRIFFIN y COLE muestran en esta obra (fruto de varios años de concienzudas observaciones en aulas escolares e intervenciones experimentales cuidadosamente diseñadas) las líneas divisorias entre las condiciones cotidianas de la enseñanza en las aulas y las prácticas de los psicólogos experimentales. Las inmejorables intenciones de las personas dedicadas a la investigación para perfeccionar la educación se ven quebrantadas a menudo por estas diferencias. La «zona de construcción» es el espacio psicológico compartido en donde el profesorado construye ambientes para el desarrollo intelectual de sus alumnos y alumnas y éstos construyen conocimientos más profundos del legado cultural que establece el currículum. El núcleo central de este libro radica en un conjunto de análisis de los cambios evolutivos de niñas y niños durante las clases y en sesiones de tutoría diseñadas para la enseñanza de conceptos básicos en áreas tan diversas como ciencias naturales, ciencias sociales y matemáticas. Fundiendo técnicas utilizadas en microsociología, psicología experimental, pedagogía y en estudios etnográficos de las aulas, los autores ofrecen una visión del desarrollo intelectual como proceso de interacción constructiva mediada por artificios culturales. Su enfoque hace posible mantener la fuerza de la perspectiva evolutiva piagetiana que trata el cambio intelectual como proceso constructivo, señalando al mismo tiempo que el cambio evolutivo es ala vez un proceso social de transformación cultural, como afirmaban con énfasis VVGOTSKV y sus discípulos.