La humanidad se halla al borde de un nuevo milenio y en los años venideros muchos tratamientos considerados hoy día inasequibles pasarán a ser algo absolutamente normal.
Muchas de estas terapias, aunque desconocidas aún para la mayoría de la gente, hace ya años que son utilizadas por amplios sectores del público de otros países. ¿Tienen realmente acceso algunos privilegiados a nuevas y misteriosas sustancias? ¿Será verdad que ciertas investigaciones están finalmente sobre la pista de la tan largamente ansiada fuente de la eterna juventud?
La respuesta es que sí; existen realmente tratamientos muy eficaces para retrasar los efectos del envejecimiento, evitando no sólo la aparición de canas y arrugas, sino, lo que es más importante, previniendo el deterioro psíquico y la aparición de ciertas enfermedades degenerativas como el cáncer, el parkinson o el alzheimer. Lo más sorprendente es que muchas de estas terapias no son nuevas, ni misteriosas, ni siquiera caras. Algunas se conocen desde hace años, pero a su alrededor, y por motivos políticos y económicos, se ha fraguado toda una conspiración de silencio. Entre otras razones, esto es así debido a su bajo coste y a que son sustancias naturales que no se pueden patentar y, por lo tanto, no resultan rentables a las grandes multinacionales.
Espero que, tras leer este libro, el público español adquiera nuevos elementos de juicio para opinar acerca de estos interesantes productos.