Desde fuera del País Vasco esta novela trata apasionadamente, pero sin prejuicios ni dependencias políticas, la historia actual de Euskal Herria. Es el testimonio de tres mujeres en el campo de la guerra, el amor, el sufrimiento y la búsqueda de una identidad. Son tres momentos históricos vistos por los ojos de una mujer, que encarna a tres generaciones sucesivas: Estella, en el final de la segunda guerra carlista, Gernika, en el año 1937, y Donostia, un día de noviembre de 1997.