Dentro del amplio espectro de la antropología general, se vuelve casi obligado el concurso de disciplinas afines, como la arqueología y la paleontología, cuando los objetos por estudiar son vestigios del pasado arcaico del hombre sobre la Tierra. En este quehacer científico altamente especializado e interdisciplinario, ocupa un lugar preponderante el trabajo de campo con los restos humanos provenientes de épocas remotas.